Seleccionada en concurso
Me ató a la cama de brazos y piernas. Salió de la habitación un momento que me pareció eterno. Se acercó con un gran cuenco de cerámica, que dejo apoyado sobre la mesilla de noche. Cogió el cazo que había dentro del cuenco y vacío sobre mi cuerpo desnudo una cantidad abundante de chocolate templado. Comenzó lamiendo mi ombligo. Frotó su cara en mi vientre y me besó. Sus besos eran deliciosos…
eleccionada en el V concurso de microrrelatos eróticos "Sensaciones y sentidos".
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